5- la lectura

Querido y amable lector, antes de nada, quisiera decirte que yo no escribo para distraer, ni para ganar dinero, escribo para llamar la atención de las personas hacia las cosas importantes para nuestras vidas, para que tu ganes en cada renglón, aunque solo sea un gramo de comprensión, de paz, y de verdad.
Los temas que expongo ahora en esta Web, van relacionados con la salud de nuestro cuerpo, la salud de nuestra mente y la salud de nuestra alma. A nuestro cuerpo le nutren los alimentos, a nuestra mente los pensamientos y a nuestra alma el gozo de hacer buenas obras, sobre todo esto hablo.
Entiendo que, para alimentar correctamente, cada una de estas partes que forman nuestra persona, debemos buscar cómo hacerlo en La Biblia, sobre la cual te recomiendo, te hagas con una para leerla aunque sea en secreto, no te dé vergüenza, vence a éste tu primer rival y después vencerás a todos los demás.


Mi decisión de escribir viene de la imposibilidad de conversar con las personas por mil causas distintas, (desinterés, incomprensión, falta de tiempo, interrupciones de algunos que minan la atención de los demás, etc.) en cambio con palabras escritas nadie te impedirá escucharlas interrumpiendo el entendimiento de tu intelecto, más bien lo contrario, cuando algo no se entiende bien, se puede volver a leer de nuevo, también puedes meditar en la misma lectura o decirme que calle dejando de leer y reanudarla cuando de nuevo puedas o lo desee.
Durante la lectura puedes formar y expresar para ti mismo opi-niones, dialogando con tus propias impresiones, sin la presencia de pareceres externos o destructivos que te lleven a reprimir tu propia opinión, y lo que es más importante de todo, puedes escucharse a ti mismo, conociendo qué piensas verdaderamente sobre estos asuntos. Cosa tan extraña y a la vez necesaria, en nuestros días; el oír nuestras propias opiniones, esta es una gran oportunidad que nos da la lectura.




Hoy vivimos en un tiempo saturado de tendencias religiosas, logias y movimientos espirituales que se presentan cada uno como portadores de una verdad única y esencial. Muchos de ellos están llenos de explicaciones imprecisas, increíbles, de nombres y entidades que nadie ha visto, conoce, ni puede comprobar. Todo parece responder más, a una creación de la imaginación que, a una realidad, lo cual no transforma ni llena de paz al corazón.
La vida apreciado lector opino, es más sencilla. El ser humano no necesita complejas revelaciones ni misterios ocultos para encontrar la verdad de su existencia ni el camino que ha de seguir para conocer la paz, la fe verdadera. La verdad es limpia y pacífica, sin adornos, se expresa con amor, humildad y obediencia. Cuanto más se aleja el hombre de esta sencillez, más se pierde, más se extravía entre las sombras, el temor y las dudas de su propia mente.
Como te digo, mi deseo es solo uno, que cuanto vaya exponiendo aquí, te sea de ayuda. Gracias..